El valle de Ourika se encuentra entre los primeros contrafuertes del alto Atlas, este valle verde es seguramente uno de las valles más protegidos de Marruecos. Después de cruzar la llanura fértil de la región del Haouz, llegaremos al pueblo bereber de Tnin Ourika, ese precioso pueblecito es el centro de la región.
Continuaremos el camino por la valle de Ourika, admiraremos las orillas del Oued (rio) Ourika, con sus praderas generosamente sombreadas por álamos y sauces llorones, especie poco habitual en la zona. Todo éstos nos transportará por un viaje multicolor en el que mezcla el color ocre de la tierra con el verdor intenso. Es sorprendente el duro trabajo llevado a cabo por las poblaciones bereberes de la región que no han dudado en utilizar los materiales que les ofrece la naturaleza cercana, necesarios para la construcción de pequeñas casas embutidas en la montaña, así como para dar forma a las terrazas tan necesarias para practicar la agricultura en estos ambientes hostiles.
Una vez allí, dejaremos aparcados los vehículos y nos iremos a dar un paseo por las cascadas de "SETTI FATMA»... en ellas tendremos la posibilidad de introducir los pies en el agua cristalina del río, sentir la corriente y poder adentrarnos en el lugar charlando con los lugareños y si nos apetece compartir con ellos un buen té de menta antes de regresar al restaurante cerca del rio para almorzar en orilla del rio y volver a Marrakech.
El ambiente y el paisaje único sin duda os impresionará!
Llevad bien abiertos todos los sentidos, por cada uno de ellos se introducirán sensaciones únicas.
* Se aconseja llevar ropa cómoda y adecuada a los cambios climáticos.